miércoles, 24 de noviembre de 2010

El aliado enemigo: Josef Stalin

No se desvela un gran secreto si se tilda al estalinismo como una de las peores lacras de la historia del siglo XX. Josef Stalin fue uno de los dictadores más sangrientos y peligrosos que se han paseado por Europa. En una entrevista de la BBC el historiador Lawrence Rees hace una reflexión sobre el trato benévolo que se brindo al líder comunista.

Él tuvo las manos manchadas con la sangre de millones de personas pero Josef Stalin escapó al juicio que la historia le deparó por ejemplo a Adolf Hitler. ¿Por qué el ex líder soviético se salvó de esta condena? Ésta es la opinión del historiador británico Lawrence Rees.
Hace unos meses, durante una visita a una de las universidades británicas más importantes, vi por casualidad un gran póster desplegado en la pared de una de las residencias de estudiantes. Era de Josef Stalin.
Tal vez fuera una referencia irónica a algo. Tal vez simplemente estuviera cubriendo una mancha de humedad en la pared. Pero, en cualquier caso, a nadie parecía llamarle la atención.
Imagínese qué pasaría si en lugar de Stalin allí hubiera una imagen de ese otro terrible tirano del siglo XX, Adolf Hitler. Imagínese la lluvia de protestas.

Todo esto es sintomático de lo siguiente: según el juicio de la historia (o al menos según el juicio del individuo británico común y corriente) Stalin parece haber salido más airoso de lo que merecía, y eso que él fue el responsable de la muerte de millones de personas.
Sus sospechas y su paranoia condenaron a la tortura y a la muerte a muchos individuos totalmente inocentes.
Cualquiera que tenga un conocimiento mínimo sobre Stalin sin duda sabrá de su naturaleza monstruosa.
Pero hay una explicación lógica sobre por qué el líder soviético está considerado todavía como una figura no tan oscura como debiera ser. Y es que todavía vivimos, en cierto modo, a la sombra de la información color de rosa sobre la Unión Soviética (URSS) que los aliados occidentales fabricaron como si de salchichas se tratara durante la segunda guerra mundial.

Propaganda aliada
En Gran Bretaña muchos periódicos estaban decididamente a favor de los esfuerzos soviéticos durante la guerra.
Además, el hecho de que el escritor George Orwell no lograra publicar su fábula Rebelión en la Granja, una brillante sátira sobre el estado soviético, es indicativo de que había entonces poco apetito por equilibrar la información con horrores.

Es más, en Estados Unidos, en la edición de enero de 1943 la revista Time publicó en la portada la imagen de Stalin como "Hombre del año" de 1942.
"1942 fue un año de sangre y fuerza", decía la revista.
"El hombre cuyo nombre significa acero en ruso, cuyas escasas palabras en inglés incluyen la expresión estadounidense "tough guy" (chico duro) fue el hombre de 1942... Los métodos de Stalin fueron duros, pero valieron la pena".

En otro artículo aún más positivo sobre Stalin, publicado en la revista Life en marzo de 1943, se describía a la Unión Soviética como una nación "casi igual que Estados Unidos", con gente que "parece estadounidense, se viste como los estadounidenses y piensa como los estadounidenses".
Además, en él se calificaba a la tristemente célebre policía secreta de Stalin, la NKVD (predecesora de la KGB), como "una policía nacional similar al FBI".

"Una mentira conveniente"
Pero el premio al más grande lavado de cara de Stalin se lo lleva la película de 1943 "Misión a Moscú", de los Warner Brothers, basada en un libro escrito por Joseph Davies, un ex embajador estadounidenses en la URSS.


Tanto en el libro como en la película, se presenta a Stalin como una figura paternal para la Unión Soviética, un hombre gigante responsable de proyectos enormes de industrialización.
Y las purgas estalinistas, en las que sufrieron decenas de miles de inocentes, se pasan por encima como necesidades implícitas para la seguridad del estado.
Más tarde el productor de "Misión a Moscú", Robert Buckner, describiría la película como "una mentira conveniente para fines políticos".
Ya en los años 50 el largometraje fue condenado como propaganda pro soviética, pero durante la guerra fue un material extremadamente influyente.
Y no es que los gobiernos de Reino Unido y Estados Unidos no supieran la verdad sobre el régimen asesino de Stalin.
No sólo sabían ya en 1940 de la brutalidad con que las fuerzas estalinistas se comportaban en los territorios ocupados, sino que además el entonces presidente de EE.UU., Franklin Roosevelt, y el primer ministro británico Winston Churchill llegaron incluso a suprimir la información que denunciaba el hecho de que Stalin y su policía secreta habían orquestado un asesinato masivo: el de la muerte de miles de oficiales polacos en la masacre del bosque de Katyn.

Claro que no es difícil entender por qué los líderes políticos de EE.UU. y Reino Unido sintieron que tenían que dar una imagen positiva de Stalin y de la Unión Soviética.
La realidad era que la URSS era un aliado vital y que occidente necesitaba la ayuda del Ejército Rojo para luchar contra los alemanes.

El problema es que el legado de estas "mentiras convenientes" todavía no nos ha abandonado. Por eso espero que la gente llegue a darse cuenta de cuán atroz Stalin fue, y que los estudiantes se lo piensen dos veces antes de colgar imágenes de él por las paredes.

Fuente: BBC

10 comentarios:

pedroboso dijo...

Luis, mi enhorabuena, excelente post!!

Poco más que añadir, te doy toda la razón. Stalin luchó con los aliados, y claro, había que defender (o justificar) su régimen y métodos, ya que los enemigos eran los nazis.

Ya comenté en un post anterior, que lo que me molesta es que un tipo vaya por la calle con una camiseta con una esvástica (pocos se atreven) y por otro lado, sí que ves a muchos con las camisetas de la hoz y el martillo... y no pasa nada!! Nadie les mira mal.

Cuanta ignorancia...

Luis Guerra dijo...

Gracias, Pedroboso.

En este caso el axioma “el enemigo de mi enemigo es mi amigo” cobra verdadero significado.

Solo hubo una persona que aviso del peligro que representaba el comunismo; el General George Patton. Llego incluso a acoger bajo su mando a tropas de las SS dándoles entrenamiento militar. Se decía que los quería a su lado en la lucha contra el comunismo.

Un saludo

Mario Tenorio dijo...

La verdad es que esta entrada me ha gustado mucho. Ya conocéis algunos mi anticomunismo militante, así como muchos otros "anti...".

Stalin fue como una herramienta mohosa y cortante que en cualquier momento te podía herir. Fue usada por los Aliados y al final, el romanticismo histórico le ha permitido pasar a la historia sólo como el hombre que ayudó a salvar el mundo.

Saludos desde el sur.

Humberto dijo...

Bueno Luis. Impecable. Al 100% con tus opiniones y con la de los contertulios.

Os recomiendo: "Archipielago Gulag" y "Un día en la vida de Ivan Denisovich". Ambos de Alexander Solzhenitzyn. Impresionantes.

Luis Guerra dijo...

Gracias, Humberto.

Solzhenitzyn un escritor magnifico por como cuenta sus vivencias y por lo que cuenta.

En una próxima entrada ya me encargaré de meter un poco de caña a los anticomunistas que me rodean jejeje.

Un saludo.

Ludovica dijo...

Luis, recientemente ví una película sobre Patton, creo que la protagonizaba George C. Scott. No sé si reflejaba bien la realidad o si los guionistas se sacaban mucho de la manga, pero si reflejaba la realidad no me extraña que no hicieran mucho caso a Patton cuando "vió" el peligro del comunismo, ese tío esaba zumbado. ¡Entrenar a tropas de las SS!

Mario Tenorio dijo...

Ludovica, ¡era el Dalí de los generales!

Saludos desde el sur.

Luis Guerra dijo...

Estoy de acuerdo con Ludovica, ¡estaba zumbado!

Un saludo

Mario Tenorio dijo...

http://www.elpais.com/articulo/internacional/Parlamento/ruso/reconoce/Stalin/ordeno/fusilar/miles/polacos/elpepuint/20101126elpepuint_10/Tes

Saludos desde el sur.

ROBERT DLUCAS dijo...

STALIN LO FAVORECIO ADOLF HITLER AL ENTRAR EN GUERRA ALEMANIA Y LA UNION SOVIETICA, COMETIO TANTOS CRIMENES COMO LOS NAZIS