jueves, 28 de marzo de 2013

Eddie Chapman

 
Eddie Chapman fue un ladrón y un mujeriego que le gustaba vivir lujosamente en la Inglaterra de mediados de los años treinta. Tuvo numerosas amantes procedentes de la alta sociedad británica que fueron chantajeadas mediante fotos que un cómplice  hacia cuando éstas se encontrada desnudas. Otra de las actividades delictivas de Chapman era el robo de cajas fuertes. Para evadir a las fuerzas del orden, Chapman marchó a Jersey donde fue capturado e internado en prisión. El establecimiento penitenciario estaba dividido para acoger a internos de distintos sexos y nuestro protagonista de hoy utilizaba sus conocimientos en la aperturas de cerradura para pasar cada noche al ala de internas y realizar sus conquistas más variadas.


Pocos meses más tarde, los nazis invadieron la isla y Chapman que se consideraba apátrida fue reclutado para trabajar como agente secreto alemán. Eddie Chapman vio la oportunidad de vivir aventuras y abandonar la prisión donde debía cumplir una condena de catorce años. Así que tras un entrenamiento intensivo por parte de los alemanes, se lanzó en paracaídas en tierras inglesas. Su misión fue destruir la fábrica en donde se construía los caza Mosquito. Inesperadamente llamó a la puerta del MI5, la agencia de inteligencia británica, y les contó todo el plan alemán. Rápidamente se ganó el beneplácito inglés.

Los británicos explosionaron la fábrica permitiendo que  Chapman volviera a Alemania como doble agente -los ingleses le denominaron agente Zigzag- y siendo considerado por los germanos como un héroe. Fue ascendido a teniente y tratado como uno de los suyos; recibió la cruz de hierro y 110.000 marcos.


Le fue encomendada la misión de informar sobre los lugares en que las bombas volantes V2 caían en suelo británico. Chapman desinformó acerca de las localizaciones y alejó el punto de mira alemán de los siguientes lanzamientos.

Tras la guerra, se dedicó a vivir la vida con el dinero que consiguió de ambos bandos y a seguir persiguiendo damas. Murió a la edad de 83 años en 1997 cuando era el dueño de un establecimiento de spa.

Una vez dijo un ex-jefe suyo que: "Eddie Chapman se amaba a si mismo, a la aventura y a su país, probablemente en ese orden".

Existe una película titulada "Triple Cross" sobre su vida.

lunes, 25 de marzo de 2013

Batalla aérea sobre Inglaterra


El ataque aéreo sobre Gran Bretaña se inició el 10 de julio de 1.940 y estuvo dirigido contra los barcos y los puertos del sur de Inglaterra. La Luftwaffe disponía en total de unos 2.670 aviones (Junkers, Dorniers, Heinkels, Stukas, Focke-Wulfs y Messerschmitts), mientras que la R.A.F. contaba únicamente con unos 650 Spitfires y Hurricanes y la ventaja logística del radar así como una mayor facilidad para repostar en combate.

La segunda fase de la ofensiva del mariscal Goering, dirigida contra las defensas aéreas británicas, instalaciones y aeródromos de la R.A.F. y líneas de comunicación terrestres, se desarrolló entre el 24 de agosto y el 6 de septiembre y estuvo a punto de suponer la definitiva derrota británica.

El 7 de septiembre, Hitler y Goering cambiaron repentinamente el objetivo de los ataques de la Luftwaffe, dirigiéndose contra Londres en respuesta a un bombardeo británico sobre Berlín. En esta tercera fase, los objetivos dejaron de ser militares y pasaron a ser civiles. Esto dio tiempo a la R.A.F. para reparar sus aeródromos y para concentrar sus esfuerzos en la defensa efectiva

El gran cambio tuvo lugar el domingo 15 de septiembre de 1.940. Al mediodía la Luftwaffe inició un gran ataque contra Londres y tuvo que enfrentarse por primera vez con una defensa masiva de cazas británicos que llegaron a sumar entre 250 y 200 Sitfire y Hurricane. Churchill, que siguió los combates desde el puesto de mando de la XI División, recibió del vicemariscal del Aire Park, a su pregunta sobre las reservas, la misma respuesta que éste había obtenido del general Gamelin a idéntica pregunta: "ninguna".

Los británicos habían echado toda la carne en el asador. La Luftwaffe perdió ese día 56 aviones, aunque la propaganda británica amplió su éxito y habló de 185 aparatos derribados. Lo cierto es que las bajas de la Luftwaffe fueron demasiado sensibles como para intentar una invasión. La opinión mundial también empezó a dudar: en los EE.UU. se afianzó la creencia de que los británicos aguantarían el golpe.

Desde la ventaja que ofrece la retrospectiva, se observa que los alemanes habían perdido la batalla debido fundamentalmente a graves errores cometidos por sus mandos:

1.- Faltaron bombarderos y cazas de gran radio de acción.

2.- Se infravaloró la capacidad del radar británico y se malogró la oportunidad de destruirlo.

3.- Se cambió de objetivo operacional, de puntos estratégicos e instalaciones del Fighter Command a los muelles de Londres, muy poco antes de coronar con éxito la primera meta.

Sin los errores segundo y tercero hubiera sido posible un resultado positivo para los alemanes. Sin la defensa de los cazas británicos, los bombarderos alemanes hubiesen tenido abiertas las puertas de Inglaterra, con gran perjuicio de la flota británica, pues si bien las bombas alemanas no estaban en condiciones de causar graves daños a los acorazados británicos, sí hubiesen podido hacer estragos en sus bases, y sin petróleo ni municiones la flota británica hubiese quedado anulada.

A esto se referían los jefes de de la flota británica en sus análisis, al afirmar, antes de estos sucesos, que "en caso de que los alemanes llegaran a dominar el cielo, los buques de guerra sólo podrían contener la invasión durante escaso tiempo". Así, tras haber dominado el cielo, y en consecuencia, paralizado la flota, el mando alemán, pese a los escasos medios de los que disponía, hubiera podido llevar a cabo la invasión. Esto, según palabras de Churchill, hubiese decidido la guerra: con los aviones y el potencial industrial británico en manos de Hitler, nada hubiese podido parar la máquinaria de guerra alemana.

La Batalla de Inglaterra constituyó la primera derrota importante de la Alemania nazi y frustró el intento de Adolf Hitler de invadir Gran Bretaña. Winston Churchill declararía: "Nunca antes en el campo de los conflictos humanos, tantos debieron tanto a tan pocos", en referencia a los miembros de la R.A.F. El III Reich jugó y perdió su suerte a finales del otoño de 1.940, aunque nadie pareció darse cuenta de ello.

Fuente: La Segunda Guerra Mundial

lunes, 18 de marzo de 2013

Hitler J


Durante la 2ª Guerra Mundial el ejército británico contó con un grupo especial denominado SOE (Special Operations Executive). El grupo, que fue creado para tratar de organizar la resistencia en los países ocupados por los nazis, se servía de espías para realizar sus operaciones.

Estos agentes utilizaban todo tipo de falsificaciones que ayudaban a completar sus misiones. Entre las falsificaciones normalmente necesitaban licencias de armas de fuego o permisos de trabajo y siempre o casi siempre pasaportes.

Para ello contaron con un experto grupo de falsificadores. Y así fue, tal era el nivel que necesitaban que llegaron incluso a liberar a falsificadores de la cárcel para que trabajaran a su servicio.

Y lo consiguieron, sus falsificaciones llegaron a ser tan perfectas que muchas de ellas se han conservado con el paso del tiempo. Un ejemplo de ellas es el pasaporte de Adolf Hitler. El porqué realizaron ese pasaporte no esta claro, simplemente un ejemplo más o una muestra del humor inglés, el caso es que se realizó en 1941 y se ha conservado.

En él se dice que la ocupación del líder alemán era la de pintor (más humor inglés .... ) y se describen características físicas como su color de ojos o el sexo. Incluso dicen que tiene un bigote recortado.

Pero lo más "curioso" que introdujeron en dicho pasaporte fue la “J” mayúscula y roja que en realidad estaba reservada para los judíos en los verdaderos pasaportes alemanes.

Fuente: Errores Históricos

lunes, 11 de marzo de 2013

Sorteo El informe Müller


Bueno, os dejo el resultado del sorteo de un ejemplar del informe Müller. La numeración ha sido según el orden de recepción de los mensajes.


Sorteos avanzados


Ver los resultados del sorteo

Resultados del sorteo:

  • Puesto1: 1
El sorteo ha quedado almacenado.

Puede consultarlo en la pagina del sorteo

jueves, 7 de marzo de 2013

El despreciable Julius Hallervorden.

J. Hallervorden junto al cuerpo de un niño asesinado.
De vez en cuando es bueno para la memoria recordar los horrores del nazismo. Cada vez estoy más convencido de que la sociedad actual no sigue lejos de aquellas ideas que dominaron Europa. Me explico. Creo que hoy todo lo bañamos en la tinta del egoísmo y el buenismo; lo primero por interés, lo segundo por comodidad. Cuando la libertad de un grupo toma y roba la de los demás surge el nazismo o como demonios se llamara hoy día.

Hoy no somos mejores que entonces. La Alemania de los años treinta se entregó a los brazos de un partido brutal y asesino que provocó una guerra mundial y la destrucción de Europa. También destruyó la firmeza moral de una sociedad que confundía la guerra con el supuesto derecho a crecer como país, que encontró la cabeza de turco propicia en el pueblo judío, así como la "obligación" de limpiar la raza para mejor futuro del pueblo alemán. Todo ello sembró de cadáveres el continente europeo y dejó una huella indeleble para los tiempos venideros.

Cartel de propaganda del programa de eutanasia.
En esos años de barra libre para los psicópatas que investidos por la autoridad del momento dejo pacer y hacer en todos los ámbitos de la sociedad. En la medicina hubo gente despreciable, un ejemplo conocido fue Julius Hallervorden, un neurólogo alemán que se dedicó a diseccionar cerebros infantiles para "estudiarlos". A cubierto por medio del programa de eutanasia establecido en aquella época, Hallervorden abrió 697 cerebros de enfermos de esquizofrenia, epilepsia y otras enfermedades neurológicas. Asesinados por haber sido considerado según la terminología nazi como "idiotas" o "comedores inútiles" y siendo utilizados sus cuerpos por los carniceros con bata del régimen nazi. En 1945, dicho programa había acabado con las vidas de 275.000 personas. La excusa oficial era el ahorro de recursos económicos.

Hallervorden sobrevivió a la guerra y no fue penado por la utilización en sus experimentos científicos de cerebros provenientes de ejecutados por el régimen.  En las décadas siguientes estudió junto a otro doctor nazi, Hugo Spatz y dio su nombre a una enfermedad neurológica.  Consiguió que la sociedad y la justicia dieran validez científica a sus tropelías No fue el único científico que se libró de la justicia. Otro día escribiré sobre más ejemplos no muy ejemplarizantes.

lunes, 4 de marzo de 2013

La noche de la infamia.


En la noche del 9 de noviembre de 1938 hubo un estallido de violencia contra los judíos en todo el Reich. Parecía imprevisto, provocado por la furia de los alemanes por el asesinato de un funcionario alemán en París en manos de un adolescente judío. Pero en realidad, el ministro de propaganda alemán Joseph Goebbels y otros nazis habían organizado cuidadosamente los pogroms. En dos días, más de 250 sinagogas fueron quemadas, más de 7.000 comercios de judíos fueron destrozados y saqueados, docenas de judíos fueron asesinados, y cementerios, hospitales, escuelas y hogares judíos fueron saqueados mientras la policía y las brigadas de bomberos se mantenían al margen. Los pogroms se conocieron como Kristallnacht, la "Noche de los cristales rotos", por los cristales destrozados de los escaparates de las tiendas que llenaron las calles.
La mañana posterior a los pogromos, 30.000 judíos alemanes fueron arrestados por el "delito" de ser judíos y fueron enviados a campos de concentración, donde cientos de ellos murieron. Algunas mujeres judías también fueron arrestadas y llevadas a cárceles locales. Se prohibió que los negocios propiedad de judíos reabrieran a menos que fueran administrados por no judíos. A los judíos se les impusieron toques de queda, que limitaban las horas del día en que podían salir de sus casas.
Después de la "Noche de los cristales rotos", la vida fue todavía más difícil para los niños y adolescentes judíos alemanes y austríacos. Los menores, que ya tenían prohibido entrar a museos, parques públicos y piscinas de natación, ahora eran expulsados de las escuelas públicas. Los jóvenes judíos, al igual que sus padres, fueron totalmente segregados en Alemania. En la desesperación, muchos adultos judíos se suicidaron. La mayoría de las familias trataba angustiosamente de irse.

Fechas claves

28 DE OCTUBRE DE 1938
ALEMANIA EXPULSA A LOS JUDÍOS POLACOS

Cerca de 17.000 judíos polacos son expulsados por Alemania y forzados a cruzar la frontera con Polonia. Polonia se niega a dejar que los judíos entren. La mayoría de los deportados quedan varados en tierra de nadie entre Alemania y Polonia cerca de la ciudad de Zbaszyn. Entre los deportados se encuentran los padres de Herschel Grynszpan, un judío polaco de 17 años que vive en París, Francia.
7 DE NOVIEMBRE DE 1938
UN DIPLOMÁTICO ALEMÁN RECIBE UN DISPARO EN PARÍS

Herschel Grynszpan, un judío polaco de 17 años que vive en París, le dispara a Ernst vom Rath, un diplomático adjunto de la embajada alemana en París. Aparentemente, Grynszpan actúa por desesperación ante la suerte de sus padres, que están varados con otros judíos polacos deportados en tierra de nadie entre Alemania y Polonia. Los nazis usan el hecho para avivar el fervor antisemita, diciendo que Grynszpan no actuó por su cuenta, sino que lo hizo como parte de una conspiración judía más amplia contra Alemania. Vom Rath muere dos días más tarde.
9 DE NOVIEMBRE DE 1938
JOSEPH GOEBBELS EXIGE UNA ACCIÓN RADICAL

El ministro de propaganda alemán Joseph Goebbels pronuncia un vehemente discurso antisemita ante los fieles miembros del partido nazi en Munich, que están reunidos para conmemorar el aniversario del infructuoso Putsch de la cervecería de 1923 (el primer intento de Adolf Hitler de tomar el poder). Después del discurso, los funcionarios nazis les ordenan a las tropas de asalto (SA) y a otras formaciones del partido que ataquen a los judíos y destruyan sus hogares, sus comercios y sus centros de culto. La violencia contra los judíos dura hasta las horas de la mañana del 10 de noviembre y se conoce como Kristallnacht: la "Noche de los cristales rotos". Varias docenas de judíos pierden la vida y decenas de miles son arrestados y enviados a campos de concentración.
12 DE NOVIEMBRE DE 1938
LOS NAZIS MULTAN A LA COMUNIDAD JUDÍA

El estado nazi impone una multa de mil millones de reichsmarks ($400.000.000) a la comunidad judía de Alemania. Después del pogrom, los judíos son obligados a limpiar y a hacer reparaciones. Se les prohíbe cobrar seguros por los daños. En su lugar, el estado confisca los pagos que las aseguradoras les deben a los propietarios judíos. Después del pogrom, los judíos son excluidos sistemáticamente de todas las áreas de la vida pública de Alemania.

Recordar que podeis apuntaros para el sorteo del "informe Müller"
Fuente: Museo americano del holocausto