lunes, 18 de marzo de 2013

Hitler J


Durante la 2ª Guerra Mundial el ejército británico contó con un grupo especial denominado SOE (Special Operations Executive). El grupo, que fue creado para tratar de organizar la resistencia en los países ocupados por los nazis, se servía de espías para realizar sus operaciones.

Estos agentes utilizaban todo tipo de falsificaciones que ayudaban a completar sus misiones. Entre las falsificaciones normalmente necesitaban licencias de armas de fuego o permisos de trabajo y siempre o casi siempre pasaportes.

Para ello contaron con un experto grupo de falsificadores. Y así fue, tal era el nivel que necesitaban que llegaron incluso a liberar a falsificadores de la cárcel para que trabajaran a su servicio.

Y lo consiguieron, sus falsificaciones llegaron a ser tan perfectas que muchas de ellas se han conservado con el paso del tiempo. Un ejemplo de ellas es el pasaporte de Adolf Hitler. El porqué realizaron ese pasaporte no esta claro, simplemente un ejemplo más o una muestra del humor inglés, el caso es que se realizó en 1941 y se ha conservado.

En él se dice que la ocupación del líder alemán era la de pintor (más humor inglés .... ) y se describen características físicas como su color de ojos o el sexo. Incluso dicen que tiene un bigote recortado.

Pero lo más "curioso" que introdujeron en dicho pasaporte fue la “J” mayúscula y roja que en realidad estaba reservada para los judíos en los verdaderos pasaportes alemanes.

Fuente: Errores Históricos

3 comentarios:

Humberto dijo...

Respecto a este tema, pero en el bando contarrio, hay una película austro-alemana muy buena llamada "Los falsificadores". Basada en hechos reales, que cuenta como los alemanes usaban prisioneros judíos para falsificar moneda británica.

Altamente recomendable.

Un saludo a todos.

Luis Guerra dijo...

Humberto,la película de los falsificadores esta basado en un libro. Si puedes hacerte con él es muy recomendable

Ludovica dijo...

Curioso lo de la "J". Esto de falsificar pasaportes me recuerda el papel que tenía el actor Donald Pleasence en "La gran evasión", donde su personaje de Colin Blythe se dedicaba a falsificar documentos y al final se queda prácticamente ciego.