sábado, 28 de agosto de 2010

Martin Bormann, el secretario de Hitler





En el blog de Jesús Hernández, ¡Es la Guerra!, salía a colación la figura de Martin Bormann. Reconozco que a este jerarca nazi le tengo una especial antipatía, pero me gustaría reseñar algunos datos biográficos y que pudiéramos cambiar impresiones acerca de este personaje.

Martin Bormann nació en Halberstadt y cuando entro en el NSDAP, ya tenía antecedentes en la extrema derecha. El primer cargo que desempeñó fue el de jefe de Prensa en un distrito. Ya había tenido alguna relación con organizaciones antisemitas tras la Primera Guerra Mundial, la cual no la pasó en primera línea del frente precisamente. Tuvo un problema con la ley ya que participó en un asesinato ritual y fue condenado a un año de prisión. Después, en busca de su destino, ingresó en el Front Bann, la organización de Ernst Röhm y más tarde se afilió al partido de Hitler. Allí trabajó y tuvo algún cargo de importancia como la dirección de la Caja de Ayuda Social. Se acercó al círculo personal de Hitler, siendo éste padrino en su boda. Fue nombrado Reichleiter en 1933 y logró total confianza del Führer.

Este nivel de confianza fue tal, que Hitler le confió la gestión de su patrimonio personal. Su trabajo se convirtió en imprescindible, además de actuar como contertulio en las sobremesas del dictador.
Colaboró en la búsqueda de financiación, logrando que la industria alemana aportará su ayuda al NSDAP.

A raíz del vuelo de Hess a Inglaterra en 1941, y, por tanto, su eliminación del directorio de jerarcas nazis, su poder se vio incrementado y se mantuvo fiel a Hitler hasta el final. Controló el acceso a Hitler y su función de secretario le ayudó a tener el poder de interpretación de “la voluntad del Führer” tomando decisiones por su cuenta y riesgo.

En los últimos momentos del Tercer Reich, extremó el fanatismo del partido, disfrutando con regocijo del repudio de Hitler hacia Goering y Himmler. Tras el suicidio del dictador, murió en el barrio de Mitte. Siempre se pensó en la posibilidad de que hubiera huido a Sudamérica, pero en los años setenta, su cadáver fue identificado cerca de la estación de Lehrter, en Berlín.

5 comentarios:

Humberto dijo...

La verdad es que siendo bien conocido y protagonista de la Alemania Nazi, no se ha escrito mucho sobre él y guarda un halo de misterio y sordidez.

No sé hasta que punto influyó en Hitler y en la política nazi. Probablemente sea uno de los pocos "misterios" que queden la época.

Por cierto, el video, fantástico.

Un saludo a todos.

Luis Guerra dijo...

Hola Humberto:

Interesante la posible influencia de Bormann en l apolítica Nazi. Durante los últimos años fue una persona muy temida, el NSDAP estaba en su puño.
Es verdad que hace falta un estudio más profundo de su persona.

Un saludo

Humberto dijo...

Pero Luis, ¿esa inflencia se circunscribía solo al dogma?

¿Se inmiscuía en la toma de decisiones y de organización?

Tengo entendido que más bien solo en el primer aspecto.

Luis Guerra dijo...

Hola Humberto:

Bormann era la persona que controlaba la agenda del Führer, si alguien quería ver a Hitler debía pasar antes por él, eso es como si tomara decisiones.

Un saludo

Anónimo dijo...

Es curioso porque yo la idea que tenía es que Bormann había espiado a favor de los sovieticos contribuyendo a la derrota nazi en Stalingrado y que una vez acabada la guerra había huido a la URSS y había muerto allí en los años 50