jueves, 13 de septiembre de 2012

Esconderse en los libros.


Ya se sabe que los niveles de lectura en nuestra querida y ruinosa España están por los suelos. Es difícil que un adolescente se habitúe a coger una vez al día un libro con el sencillo objetivo de aprender y entretenerse. Estos chavales de hoy tienen demasiadas distracciones y el anticuado invento del libro no pasa por ser una prioridad.

En este final de verano he intentado, una vez más, que mi hijo mayor se sienta atraído por la lectura. Observo como los libros que le obligan a leer durante el curso son aburridos y sobre todo falto de interés para su edad. Así que he adoptado una medida desesperada. Le he pedido que se lea El diario de Anna Frank. La idea es que lea algo que le impacte y le despierte su curiosidad. Ya se que muchos de vosotros pensaréis que el texto es duro pero espero que resulte positivo para él.

He aprovechado para releer un poco por encima la historia de la famosa niña judía. Lo leí hace tanto tiempo que me está resultado nuevo en muchos detalles y partes de la historia. He llegado a tener la sensación que el texto está muy retocado. No parece escrito por una niña y el vocabulario es más avanzado del que Anna, imagino, manejaría entonces.

Si Otto Frank se dedicó a meter la pluma en el cuaderno de su hija, no lo puedo asegurar, ya he dicho que son sólo sensaciones propias. Sólo se que el libro es más estremecedor por lo que no cuenta que por el relato en sí. Un sinvivir con el peligro constante de ser descubierto y denunciado por cualquier vecino.

Bueno, pronto escribiré de un estupendo pequeño gran libro que he leído y que me ha maravillado, pero como diría Conan, "ésa es otra historia".

16 comentarios:

Anónimo dijo...

Descuide, si está muy retocado o avanzado para la edad de la ñiña; es fácil, no hay más explicación. Es inventado.

Humberto dijo...

Creo que en las escuelas cometen el error de obligarles a leer unas determinadas lecturas sin dejar que sean los alumnos quienes sean los que eligan los títulos.

Y los que somos lectores sabemos perfectamente el sufrimiento que supone leer algo que no te gusta.

¡Imagínate para alguien no acostumbrado a leer! Acabará odiándolo.

Un saludo a todos.

Fubar dijo...

Yo hasta los 18 años solo cogía los libros por obligación, García Lorca, Cervantes, Cela, García Marquez... y un largo etc. Alguien podría decirme porque los pedagogos y profesores de lengua "castigan" a niños y adolescentes con estas obras!! Lo único que consiguen es que odien la lectura, porque este tipo de obras gustan a 1 de cada 100 (y creo que me excedo). Serán obras de prestigio (aunque aquí en Austria, donde trabajo) Cervantes y García Lorca entre otros son tan conocidos como María Jose y sus muñecos, así que... Saludos.

Mario Tenorio dijo...

La verdad es que estoy por pensar que el libro es falso, pero claro, no tengo nada más que sospechas. Lo cierto es que lo que relata es una de tantas y terribles historias que dejó el nazismo.

En mi caso con 12 años ya me había leído a buena parte de los grandes escritores españoles del siglo XIII hacia adelante y no creo que provocara en mi otra cosa que el pistoletazo de salida para un largo historial como lector empedernido. Tengo que decir que tuve al profesor ideal para promover la afición a la lectura. D. Manuel Luis Martín Moreno tuvo la "culpa" de todo ello. Falleció hace unos pocos años y nunca tuve la valentía de pararlo por la calle, cuando me lo encontraba, y decirle cuánto agradecido estaba por haber despertado en mí el amor por los libros. Hoy lo recuerdo con sincera emoción. Sólo acerté a hablarle a un familiar de mi mujer, periodista y amigo de mi maestro de EGB, haciéndole partícipe de mi pesar por su muerte, Éste publicó un artículo sobre él.

Saludos desde el Sur.

Ludovica dijo...

Mario, supongo que tu hijo debe ser adolescente. Yo le recomendaría algo de Alejandro Dumas, de Emilio Salgari o de Julio Verne. A esas edades no hubiera sido capaz de leer el Diario si hubiera tenido intención de leerlo. Ahora no he sido capaz de leerlo más que por fragmentos, porque me da una pena terrible pensar lo que debió pasar esa familia.

En cuanto a la veracidad o no del Diario, a estas alturas no creo que importe tanto si lo escribió Anna o su padre, sino que todos sabemos que es testimonio de algo que ocurrió de verdad.

Mario Tenorio dijo...

Ludo, buena elección, te la agradezco. La pondré en práctica.

Por cierto, Ovelord, la de los muñecos era Maricarmen, jeje.

Saludos desde el Sur.

Fubar dijo...

jeje! Gracias Mario! Mis disculpas a esta señora y sus muñecos! Pero reitero lo que dije, aquí en Austria la gente no tiene ni idea de quien es Cervantes, García Lorca, Quevedo...

En mi opinión lo de la lectura es cuestión de encontrar una temática o estilo literario que te guste, porque si no es imposible que un adolescente o adulto se enganche a la lectura. En mi caso devoro ensayos de historia y ciencia, pero si me das cualquier otro libro se me hace soporífero. Saludos.

Mario Tenorio dijo...

Overlord:
Sí, has dado en el clavo. Es cierto, recuerdo que con once años me fascinó la forma de vida en el medievo y éso me llevo a leer el Poema de Mio Cid y otros textos. Fuí un extraño caso, aún sin resolver por la ciencia. Más tarde, me dió por leer novela realista y me enganché a Galdós y Pío Baroja, lo que me lleva a darte toda la razón: se sigue un género o estilo y no paras durante una temporada. ¡Ah!, me acabo de acordar de mi temporada de Isaac Asimov... y no sigo más...¡ah! y mi afición por la SGM, que se ha vuelto endémica...

Saludos desde el Sur.

Fubar dijo...

Me has dejado impresionado! Con 11 años y te metiste en el cuerpo el Mio Cid! jeje! Yo a esa edad estaba en el cole con los libros del Barco de Vapor de la serie...naranja me parece. Por cierto los libros de Isaac Asimov de ciencia buenísimos!

Yo aún no soy padre, así que no puedo hablar por experiencia propia, pero en los tiempos que estamos debe ser muy, muy díficil hacer que un niño-adolescente (entre 8 y 16 años) deje las consolas, los móviles de última generación, internet, etc... para ponerse a leer un libro. Saludos.

pedroboso dijo...

Yo recuerdo haber leido la Biblia, Antigüo y Nuevo Testamento, con 8 o 9 años; y con 12 o 13 años el Quijote, el cual me impresionó.

Saludos

Mario Tenorio dijo...

Bien Pedro, alguien que me comprende, jaja.
Saludos desde el Sur.

enfermero9 dijo...

Yo soy un lector empedernido y en mi casa hay más libros que en muchas bibliotecas... dos de mis hijos se han hecho lectores con los libros de Laura Gallego, no es que tengan un gran nivel pero para empezar y que les pique el gusanillo...

enfermero9 dijo...

Y saludos desde Al sur del Sur.

Mario Tenorio dijo...

Muere Carrillo a los 97 años.

No puedo olvidar a los muertos de Paracuellos.

Saludos desde el Sur.

Anónimo dijo...

Como lo va a olvidar, debe ser usted uno de los poco que estuvieron allí.

Unknown dijo...

El Diario de Ana Frank...ya quisiera tener yo la misma cobertura y las mismas correcciones ortográficas.
¿Hay que leerlo, si, por supuesto.

¿Hay que creerlo? Ni la quinta parte, siendo muy generoso.Si nos ponemos a destriparlo y sacar las incongruencias, aparecen muchas...muchísimas. pero esto es tan conocido que para el que no quiera creer cualquier prueba es insuficiente y para el que lo crea cualquier prueba es innecesaria.